Estás durmiendo en un colchón de muelles y has empezado a notar una molestia persistente: parece que los muelles se te clavan. ¿Por qué te ocurre esto? La causa más habitual es el desgaste del colchón. Aunque en su momento fue una gran elección, el paso del tiempo y el uso continuado terminan afectando a la estructura interna y reduciendo su confort.
En este artículo te explicamos por qué te clavas los muelles de un colchón, cuáles son las señales de un colchón deteriorado y qué soluciones puedes valorar para volver a descansar como mereces.
¿Es normal sentir los muelles de un colchón?
Sentir los muelles al tumbarte no debería ser lo habitual. Cuando esto ocurre, suele ser una señal clara de que el colchón ha empezado a perder su capacidad de soporte o que el acolchado ya no protege adecuadamente la estructura interna. Aunque no siempre es motivo de alarma inmediata, es una experiencia incómoda que puede afectar a la calidad del descanso y provocar molestias físicas. Si te preguntas por qué te clavas los muelles, probablemente estás ante un modelo deteriorado o de baja calidad.
En algunos modelos muy antiguos o económicos, la sensación de los muelles puede aparecer incluso antes de tiempo. Por eso es tan importante conocer cómo está construido tu colchón y qué tipo de muelles incorpora.
Cómo está construido un colchón de muelles
Un colchón de muelles está formado por un núcleo de resortes metálicos que actúan como soporte principal. Este núcleo puede estar fabricado con diferentes tecnologías y va cubierto por varias capas de acolchado y tejidos que aportan confort y protegen al durmiente del contacto directo con la estructura metálica.
Cuando esas capas de confort se degradan (ya sea por el paso del tiempo, el uso intensivo o materiales poco resistentes), los muelles comienzan a sentirse. A veces no llegan a clavarse literalmente, pero sí generan una sensación de firmeza excesiva o presión localizada. En casos más extremos, los muelles pueden sobresalir o deformarse, provocando una incomodidad constante.
Qué tipos de muelles existen
Estos problemas con los muelles se dan especialmente en los colchones de muelles bicónicos. Los colchones de muelles bicónicos se componen de muelles independientes, unidos entre sí por un hilo de acero. Estos modelos, económicos y transpirables, pierden su firmeza con el paso de los años.
Los colchones de muelles ensacados son una alternativa para no tener un riesgo tan alto de clavarse los muelles. Estas versiones agrupan cada muelle en una bolsa individual, uniendo todos los muelles formando una misma red. El sistema de los muelles ensacados elimina por completo los riesgos de deformación y desgaste prematuro del colchón. Aparte de garantizar un mayor confort y una total independencia de lechos, los colchones de muelles ensacados destacan por su durabilidad.
Señales claras de desgaste o deterioro
¿Notas bultos, zonas hundidas o crujidos cuando te mueves en la cama? Esas son señales claras de que tu colchón ha perdido sus propiedades. A menudo, se notan los muelles porque el acolchado que los cubría se ha debilitado o desplazado. Si además tienes molestias al despertar o no logras descansar bien, es hora de evaluar seriamente si tu colchón sigue cumpliendo su función.
Principales causas por las que sientes los muelles al dormir
Estas son las razones más comunes por las que te clavas los muelles de tu colchón.
Colchón antiguo o deformado
Un punto a tener en cuenta es la duración. La vida útil de los colchones oscila entre los ocho y diez años de duración. Si empiezas a clavarte los muelles de tu colchón y este tiene cerca de ocho años, es posible que su vida útil esté llegando a su fin.
Baja calidad de los materiales internos
Cuando un colchón de muelles está fabricado con materiales de baja densidad o acolchados demasiado finos, el confort desaparece antes de tiempo. El núcleo de muelles queda expuesto, las capas superiores se hunden con rapidez y aparecen los primeros puntos de presión. En estos casos, da igual que el colchón tenga solo dos o tres años: si los materiales no han sido pensados para durar, acabas preguntándote demasiado pronto por qué te clavas los muelles.
Elegir un colchón solo por su precio sin revisar su composición puede salir caro a medio plazo, especialmente en el descanso.
Uso intensivo o falta de mantenimiento
Dormir, leer, ver series, teletrabajar, jugar con los niños… el colchón se ha convertido en una base multifunción. Y aunque está preparado para aguantar un uso habitual, también necesita cierto mantenimiento: girarlo periódicamente, airearlo, usar un buen protector o asegurarte de que la base está en buen estado. Si no lo haces, el desgaste se concentra en las zonas de apoyo y los muelles empiezan a notarse bajo la superficie.
Peso corporal y firmeza inadecuada
El peso del durmiente influye directamente en el rendimiento del colchón. Si eliges un modelo con firmeza insuficiente para tu complexión, las capas acolchadas se hunden más de lo necesario y dejan el núcleo al descubierto. El resultado es una presión molesta que puede sentirse como si te clavaras algo al dormir.
Esta es una de las razones más habituales por las que te clavas los muelles sin que el colchón esté necesariamente viejo o deteriorado.
¿Qué puedes hacer si te clavas los muelles del colchón?
Si te estás preguntando por qué te clavas los muelles y qué puedes hacer al respecto, aquí van las principales soluciones. Algunas son temporales, otras definitivas, pero todas están pensadas para mejorar tu descanso desde esta misma noche.
Soluciones rápidas y temporales (como usar un topper)
Los toppers pueden ser tanto de látex como de viscoelástica, dependiendo de la composición del colchón y de las necesidades del durmiente. Añadir este tipo de producto en tu equipo de descanso es una gran mejora para sus prestaciones, pero no hace milagros. Si te clavas los muelles de tu colchón y este se ha deformado por el uso, el topper no soluciona el problema. De hecho, al situar el topper sobre el colchón, este se deformará, haciéndote sentir más incómodo.
Cambiar de colchón: cuándo es realmente necesario
Cuando el colchón ha superado su vida útil (8-10 años) o los muelles se notan incluso con un topper, ha llegado el momento de renovarlo. Dormir bien es salud.
Cómo elegir un nuevo colchón que no se deforme
Opta por modelos con materiales de alta calidad, buena densidad y estructura estable. Los muelles ensacados o la espuma HR son grandes aliados. Y recuerda: elige siempre según tu peso, postura y preferencias de firmeza.
Mejores opciones de colchones si te clavas los muelles
Si aún sigues sin entender las razones por las que te clavas los muelles al dormir, la respuesta la hallarás en la elección del modelo. Y aquí van las mejores alternativas.
Muelles ensacados vs muelles tradicionales
Los muelles ensacados están encapsulados de forma individual, lo que evita el contacto directo entre ellos. Esto mejora la independencia de lechos, reduce el desgaste por presión y ofrece mayor confort y durabilidad.
Los muelles bicónicos o tradicionales, aunque transpirables y económicos, están conectados entre sí y se deforman con más facilidad. Al perder tensión, pueden sobresalir y generar molestias al dormir.
Alternativas sin muelles
Los colchones sin muelles ofrecen un descanso más uniforme. La viscoelástica se adapta al cuerpo y alivia la presión, mientras que el HR aporta firmeza. El látex es transpirable y resistente, ideal para quienes buscan naturalidad y durabilidad.
Consejos para alargar la vida útil de tu colchón
Un colchón bien cuidado puede durar más y rendir mejor. No se trata solo de dormir sobre él: también importa cómo lo proteges, lo giras o lo apoyas. Estos pequeños gestos alargan su vida útil y retrasan la aparición de problemas como hundimientos o molestias. Incluso el uso de toppers puede ayudartE.
Cómo rotar el colchón correctamente
Cada tres meses, gira el colchón de pies a cabeza para repartir el peso uniformemente. Si el modelo lo permite, también dale la vuelta. Así evitas deformaciones y puntos de presión. Si quieres saber más sobre cuándo y cómo hacerlo.
Protector y base: elementos clave para su durabilidad
Utilizar un protector de calidad evita que el colchón absorba sudor, polvo o manchas. Es una barrera higiénica que protege el núcleo sin alterar la transpirabilidad. En cuanto a la base, asegúrate de que sea firme, estable y compatible con el tipo de colchón. Una buena base evita deformaciones y garantiza una correcta ventilación, alargando la vida útil del colchón desde abajo.
Preguntas frecuentes sobre clavarse los muelles del colchón
¿Es normal sentir los muelles en un colchón de muelles?
No debería serlo. Es señal de desgaste o baja calidad.
¿Qué provoca que los muelles del colchón se noten o se claven?
El deterioro del acolchado superior o la deformación del núcleo.
¿Cómo saber si mi colchón de muelles está desgastado?
Si notas bultos, hundimientos o molestias al tumbarte, probablemente lo esté.
¿Los toppers sirven para tapar los muelles que se clavan?
No, no puede considerarse una solución temporal porque el grosor y y la consistencia de los toppers no son suficientes. Además, el topper se utiliza para mejor las prestaciones de firmeza y adaptabilidad, no de deterioros del colchón.
¿Qué tipo de colchón evita este problema en el futuro?
Modelos de muelles ensacados, espuma HR o viscoelástica de alta densidad.
¿Con qué frecuencia debería renovar un colchón de muelles?
Cada 8-10 años o antes si aparecen molestias evidentes.
¿Dormir sobre muelles que se clavan puede afectar mi salud o descanso?
Sí. Puede provocar microdespertares, tensión muscular y mal descanso.